En cuanto hayas analizado estas cuestiones, tendrás en tu mano decidir qué tipo de segunda residencia quieres comprar para que se adapte de verdad a tu bolsillo y a tus necesidades.
Qué tener en cuenta antes de comprar una segunda residencia
La demanda de vivienda de segunda residencia se ha situado en niveles máximos desde 2017. Así pues, sigue la tendencia alcista que ya se inició en 2021 y que había aumentado tras el estallido de la pandemia. Ahora, tras dos años de pandemia, la búsqueda de segunda residencia sigue en auge. Tanto es así que ya representa el 13 % del total de la demanda para comprar vivienda ahora mismo. Son datos del estudio Perfil del comprador de segunda residencia elaborado por Fotocasa Research.
La mayor parte de ciudadanos que quieren comprar una segunda residencia piensan en ella como inversión. Así es en un 45 % de los casos. Sin embargo, un 39 % opina que esta es una buena manera de amasar patrimonio. El 22 % cree que en los tiempos que corren, con la inflación por las nubes y la subida de tipos de interés acentuada, la vivienda sigue siendo un buen seguro para el futuro.
Antes de comprar, eso sí, valoran que encaje en el presupuesto (58 %), pero también que cuente con terraza o una buena orientación (40 %). Sin embargo, y especialmente como factor diferencial de estos dos últimos años, lo que aumenta considerablemente es el interés por elementos como la piscina, el jardín, las zonas comunes y los buenos accesos por carretera, que se han incrementado entre 13 y 11 puntos porcentuales.
Pero comprar una segunda residencia es un proceso complejo. Debemos poner los cinco sentidos en la operación. A continuación, vamos a indicarte qué debes tener en cuenta antes de lanzarte a la aventura de adquirir una segunda vivienda.
1. ¿Puedes pagar una segunda residencia?
Si tienes ya una hipoteca para tu primera residencia, debes pensártelo muy, muy bien. La compra de tu segunda residencia exigirá una nueva hipoteca o una ampliación de capital de la primera. Por tanto, lo más importante es estudiar bien la situación económica, teniendo en cuenta cuánto dinero gastamos cada mes, cuánto ingresamos y de cuántos ahorros podemos disponer para aportar a la compra. Hay que tener en cuenta que el banco solo suele conceder, como máximo, entre el 60 % y el 75 % del valor de la tasación del inmueble.
2. ¿En qué lugar es mejor adquirirla?
Si vas a comprar una segunda residencia para disfrutar tú y tu familia, lo más lógico es que compres la vivienda en el lugar que te haga más feliz, claro. En cambio, si lo que quieres es comprar para un alquiler vacacional o tradicional o para reformarla y venderla más cara, lo ideal será elegir una zona de interés, que pueda generar una elevada rentabilidad.
3. ¿Cuánto cuesta mantenerla?
Además tener en cuenta el precio de la compra y de las posibles reformas que quieras llevar a cabo, también tendrás que contemplar los gastos fijos. Aunque no vivas en ella durante la mayor parte del año, la segunda residencia tiene unos gastos fijos de contribución, luz, agua, gas y comunidad. Serán, como mínimo, unos 2.000 euros anuales, de media.
4. ¿A qué distancia debe estar de la primera residencia?
Si lo que quieres es aprovechar la vivienda al máximo y sacarle partido, lo ideal sería que esa segunda residencia no esté muy alejada de la primera. Es decir, que nos permita desconectar de lo agobiante que puede ser vivir en el centro de una gran urbe, pero que al mismo tiempo llegar a esa casa sea fácil, rápido y económico.
5. ¿Qué impuestos tendré que pagar?
Lógicamente, la compra de una segunda residencia también nos exigirá el pago de algunos impuestos. Cuando presentemos el impuesto de la Renta, tendremos que abonar el 2 % del valor catastral del inmueble y el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI).